Un día tan oscuro, cubierto por la negra sombra del Covid-19 que domina el mundo desde el año pasado, el deporte no fue excepto de ello. Afortunadamente, no hablaremos sobre la mortalidad del virus en un deporte tan hermoso como el fútbol americano. Hoy intentaremos visualizar el mundo después del anuncio donde supimos que Drew Brees se retira de la NFL.
Más allá de contar con una carrera que lo consolidó como uno de los mejores jugadores en su posición. El nombre de Drew Brees quedó grabado en la ciudad de New Orleans con esos colores que vistió durante 15 años.
Drew Brees se retira de la NFL
El día de hoy se anuncia que Drew Brees se retira de la NFL luego de 20 temporadas, 15 de ellas vistiendo los colores negro y oro de los New Orleans Saints. Un equipo que catapultó a la cima el siete de febrero del 2010 al ganar el Super Bowl 31 a 17 sobre los favoritos Indianapolis Colts de otra leyenda como lo es Peyton Maning.
La carrera de Drew Brees siempre fue en ascenso. A pesar de que en sus primeros años con los entonces San Diego Chargers no tenía muchas luces de lo que sería en un futuro. El cambio a un equipo que tenía tantos años a la deriva como los Santos de Nueva Orleans representó una unión perfecta.
El último llamado de Drew Brees
La vida suele ser injusta en muchas ocasiones, y esta puede ser una de ellas. Porque es muy difícil imaginar que el último pase del mejor pasador de la historia de la NFL fuera una intercepción.
Pero así fue, faltando poco más de cuatro minutos en la ronda divisional de los playoff del 2020 perdió el balón a manos de Mike Edwards. Es probable que ya tenga un hito que contar a sus hijos y nietos “yo intercepté el último pase de Drew Brees en la NFL”.
¿Cuál es el legado de Drew Brees?
Aquí no importa si eres fanático del fútbol americano o no. El solo nombre de Drew Brees representa una de las figuras más importantes en la ciudad de New Orleans. Mucho más luego de haber llegado justo después del devastador paso del huracán Katrina por la ciudad.
Un hombre que demostró talento, convicción y pasión por este deporte. Cualidades que le permitieron escribir su nombre en lo más alto de la historia de la NFL. No, no hablamos solo de las más de 80 mil yardas por pase que consiguió en su carrera.
Tampoco hablamos de ese casi 68% de efectividad en sus pases. Para hablar de Drew Brees, hay que hacerlo desde la perspectiva de la magia. Un deportista que superó las lesiones y los problemas administrativos de su equipo.
Uno que le demostró al mundo que el trabajo duro y la determinación son claves para rozar la perfección. Después de todo, ser uno de los mejores mariscales de campo en toda la historia no se gana de la noche a la mañana.
Seguramente, ese sea su mayor legado. El de un hombre que nunca renunció a una ciudad que lo acogió y que juntos formaron un matrimonio perfecto. Porque decir Drew Brees es prácticamente lo mismo que decir New Orleans Saints.
Un hombre que lo dio todo por este deporte y que quizás, el destino le quedó a deber otro anillo de Super Bowl. De lo que estamos seguros es que su lugar en el salón de los inmortales está asegurado. Por lo que solo nos queda decir Gracias Brees.
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