Son pocos, realmente pocos los eventos que pueden traer la paz al mundo entero y el Mundial de Fútbol de la FIFA es uno de ellos. No importa si es por la emoción o la magia de ver a los mejores disputarse la máxima gloria del balompié, ese es un momento único que un mundial cada dos años puede acabar.
La Copa del Mundo es, posiblemente, el trofeo más emblemático y especial de todo el planeta. Pero esa es la visión de los fanáticos, la de sus responsables, es una completamente diferente.
Un mundial cada dos años
Tal como lo anunció el Presidente de la FIFA, Gianni Infantino, hacer un mundial cada dos años no mermaría la magia del juego y que su frecuencia no significa que el interés sobre el deporte rey disminuya.
Además hizo una breve comparación con otro de los más grandes eventos del deporte a nivel mundial, el Super Bowl; sin embargo, da la impresión de que su argumento carece, y bastante, de criterio sobre el tema.
La comparativa con “La Super Bowl”
Para empezar, una de las razones por las que la NFL Football es la mejor liga de mundo, es que sabe regular la exposición de su liga como producto. Un claro ejemplo de ello es que un calendario de NFL, considerando que se llegue hasta el súper domingo, sería entre 23 a 24 partidos, contando los tres de pretemporada y tres o cuatro de post temporada.
Si vamos al fútbol, vemos que competiciones de elite como LaLiga o La Premier tienen calendarios de 38 jornadas. A eso se le suman las competiciones domésticas como las copas y las súper copas. Sin olvidarnos de los torneos internacionales como la UEFA Champions League.
Haciendo una suma rápida, estamos hablando que un equipo puede llegar a jugar hasta ¡62 partidos en nueve meses! ¿No creen que es mucho fútbol?
¿Quiénes se benefician de un mundial cada dos años?
Aquí vamos a hablar nuevamente de números, después de todo, la idea de un mundial cada dos años es un simple negocio utilizando la magia del deporte.
Para empezar ¿qué genera un mundial? Además de un cúmulo de emociones y frustraciones por partes iguales, la Copa del Mundo le genera a la FIFA más de 4 mil millones de dólares.
Creo que nos quedamos cortos, tal como lo publicó el portal de la BBC, el Mundial de Brasil 2014 le aportó al máximo órgano rector del fútbol 4 mil 826 millones de dólares. Estos ingresos provienen de los derechos de televisión, mercadería, hotelería, entre otros.
Por lo tanto, hacer un mundial cada dos años debería, en teoría, duplicar esos ingresos de la FIFA en un lapso de tiempo mucho menor, en la mitad, para ser más precisos.
Un negocio redondo ¿no? Lo es más si consideramos que la FIFA viene afrontando múltiples demandas de corrupción en la última década. Por lo que preguntar el destino real de esos fondos puede estar fuera de lugar. A todas estas ¿mencioné sobre la exigencia física de los jugadores? Creo que, al igual que la FIFA, olvidé que son seres humanos y no máquinas para llenar los bolsillos con su talento.
¿Qué significa el hipotético caso de que sea una realidad?
Un mundial cada dos años puede significar muchas cosas, pero ninguna está cerca de proteger la magia de los fanáticos. Esos que vilmente emplearon como excusa para atacar una propuesta como la Superliga.
El fútbol es magia, emoción y hazañas épicas, también suele ser ese pequeño foco de alegría y esperanza para algunas personas, que por dos horas, pueden olvidar un mal momento.
Por todo esto, la Copa del Mundo es un torneo tan especial, porque ver a los mejores del orbe representar a su nación es único y no hay mayor responsabilidad y orgullo que jugar por tu país. Aunque para los de pantalón largo solo sean cifras en sus cuentas bancarias.
Hacer un mundial cada dos años puede que sea bueno, después de todo, la Champions es cada año y sigue siendo especial. Pero recuerden que ya hay demasiado fútbol y esa rutina, más temprano que tarde, hará que la magia se pierda junto con todo lo que representa el fútbol, el deporte más hermoso y mágico del mundo.